A-D-O-R-O el papel. Eso hay que decirlo lo primero.
De lectora empedernida, a escritora en mis ratos libres y no tan libres. De recicladora de papel sí o sí (hasta por la calle), a creadora de manualidades con papel "a mi manera".
Es algo que me invade: el olor de los libros, el tacto de las páginas, las hojas amarillentas, los periódicos, los colores del origami, las dobleces que crean formas maravillosas... y así podría seguir.
Me encanta perderme en las librerías, en las bibliotecas, estar rodeada de este material... Y desde que llegué a Lisboa he puesto una caja en la cocina para no sólo reciclarlo, sino intentar reutilizarlo.
Como desde que empezó esta andadura ya decidí que todos los regalos que pudiera los haría yo misma, de aquí saco mucho material:
Ya he hecho una caja-joyero en forma de tortuga utilizando periódicos, un cuaderno con las caja de cereales, cajas para guardar cosas, tarjeteros...
Otra de las cosas que tengo en una bandeja con los papeles ya usados para utilizarlos por la otra cara. Y tan al extremo lo he llevado que mi cuaderno para estudiar portugués está hecho de estas hojas, y las redacciones que tengo que entregar a la profesora las hago en la cara en limpio de las hojas en sucio ;)
En todos los lugares en los que he trabajado me he esforzado por llevar esta mentalidad recicladora, hasta he tenido que poner yo cajas para reciclarlo y encargarme de bajarlo a los contenedores, porque sino muchas veces se tiraba a la basura normal. La mentalidad va cambiando poco a poco pero todavía mucha gente no lo cree importante. Lo que me quede... hacer un día yo mi papel. Queda pendiente*****
En todos los lugares en los que he trabajado me he esforzado por llevar esta mentalidad recicladora, hasta he tenido que poner yo cajas para reciclarlo y encargarme de bajarlo a los contenedores, porque sino muchas veces se tiraba a la basura normal. La mentalidad va cambiando poco a poco pero todavía mucha gente no lo cree importante. Lo que me quede... hacer un día yo mi papel. Queda pendiente*****
Y con esta fijación, he ido descubriendo cosas maravillosas que se pueden hacer con él:
- Cosas como las que hacen las artistas Jennifer Collier o Su Blackwell
- O vídeos como los de Lisa Hannigan
Y volviendo a lo funcional, en Madrid recuerdo dos iniciativas que me encantaban.
Una era la marza Zarzillos, bisutería 100% reciclable, hecha de cartulina enrrollada con mimo, y terminada con barniz ecológico. Aquí os dejo un ejemplo:
Y otra la Papelería Palma Papel, en plena Malasaña, C/ La Palma 34. Lleva abierta 11 años y es la primera librería ecológica y artesana de Madrid.
Ha trabajado con Ecologistas en Acción, Greenpeace, agencias publicitarias, galerías de arte, estudios de fotografía, restaurantes que utilizan su papel para hacer las cartas… La verdad es que aunque no lo parezca, sin pagina web ni grandes publicidades ha llegado a tener clientes de lo mas variado.
Y como dice Cris, su dueña, cuando le preguntas: “No es exactamente una papelería porque cuando vienen a pedirme una goma de borrar, no tengo”
Y ahora.... ¡A seguir descubriendo cosas!!!
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